Natalia Giménez es oriunda de Puerto Piray pero hace años vive en Buenos Aires, actualmente en Muñiz, partido de San Miguel, lugar de la tragedia que se llevó a Joaquín, su pequeño hijo de diez años.
El 16 de mayo Natalia se fue a trabajar por la mañana y cuando regreso a su casa cerca del mediodía se encontró con el peor panorama que una madre pueda imaginar, su hijo de tan solo diez años estaba muerto. El origen de la repentina muerte fue una fuga de gas en la casa que la Inmobiliaria Díaz le había alquilado, y no había informado de este imperfecto. Desde la Fiscalía local le instaron a que pida una propiedad y abandone el reclamo.
En diálogo con medio locales, la misionera relató que aquel fatídico día los dueños de la inmobiliaria se acercaron a solucionar el problema, “Nicolás Díaz a mi casa, a las 9 mi hijo estaba durmiendo en la habitación y a las 11 cuando la niñera va a llevarle el desayuno se encuentra con un fuerte olor y a Joaquín convulsionando”. Natalia cree que por los trabajos que se estaban llevando a cabo en la vivienda comenzó a desprenderse el gas.
Respecto a los últimos momentos de su hijo relató que “Esa gente saco a mi hijo, le hicieron RCP y al ver que no reaccionaba lo subieron a una camioneta y lo trasladaron al hospital y cuando yo llego la persona que lo había llevado ya no estaba”.
Ese mismo día, la Policía Científica me tomó declaración y solo hicieron pericia fotográfica”, aseguró Natalia, quien además tiene en su poder un documento de la empresa de Gas Natural que afirma que la casa “no está habitable”. “Los caños no son los reglamentarios y estaban agarrados con una goma”, señaló.
La madre de Joaquín denuncia que hasta el momento nadie le tomó declaración a las personas ligadas a la inmobiliaria que se encontraban en la casa, el dueño y el gasista”.
Con todo el dolor por la muerte de su hijo Natalia se acercó a la Unidad Funcional de Instrucción 23 de Malvinas Argentina y ocurrió lo impensado, una mujer que presentó como su abogada retiró la autopsia de Joaquín.
Según los datos a los que pudo acceder, una mujer de nombre Mariana Gonzales, con una matrícula y un DNI falso y alegando una dirección que no existe, se llevó la autopsia del menor.
A partir de ahí, Natalia decidió llevar la denuncia a la Fiscalía 4 de San Martín, donde no encontró la respuesta que buscaba, “la fiscal le dijo a mi abogado que pida una propiedad y me conforme, porque ella no quería trabajar en este caso”:
“La autopsia de los órganos de mi hijo dice que él estaba bien, pero aún no me dieron el toxicológico ni el análisis de sangre”,comentó la madre, quien también manifestó que la doctora del Hospital habló de muerte por inhalación de gas y luego paro cardíaco.
Fuente: SM Noticias